sábado, 27 de septiembre de 2008

Entrevista A Claudia Nazoa



Entrevista // Claudia Nazoa, presidenta de la Cámara Venezolana de Productores de Largometrajes
"La Villa del Cine es una caja negra"
"A diferencia del CNAC, donde hay una contraloría que la ejercen los gremios, yo no sé dónde está la de la Villa"

Nazoa escribió el guión de "La travesía del desierto", que será dirigida en México por el venezolano Mauricio Wallerstein, y trabaja en la adaptación de una novela de Reyes Heroles (Gustavo Bandres)
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Ideas sueltas
En 1977, Claudia Nazoa regresaba de estudiar cine en Rumania y recibió una llamada. Un señor con acento andino le proponía ser la nueva directora nacional de cinematografía. Era el mismísimo presidente de la República, Carlos Andrés Pérez, quien estaba al otro lado de la línea. Posteriormente, el presidente Luis Herrera Campíns la ratificaría en el cargo. Con los años, siempre ha compartido sus actividades en el set con las labores de escritorio y trabajo gremial. Como la actual presidenta de la Cámara Venezolana de Productores de Largometrajes -organismo fundado a finales de los 70- no deja de preocuparse por el rumbo que toma la Villa del Cine y por el tiempo que se ha tardado aprobar un reglamento que termine de normar temas relacionados con la Ley de Cinematografía aprobada en 2005, entre otros aspectos.


-¿Cuál es el problema con la Villa del Cine y el cine ideológico que hace, según su presidenta Lorena Almarza? -


Lo que nuestro gremio alertó cuando surgió la Villa era: si va a surgir como un ente dedicado a prestarle servicios a todos los cineastas, pues, en principio, no teníamos por qué estar en contra. Nos preocupaba mucho que la Villa se convirtiera en una fábrica de películas políticas con un tinte específico, del rojo rojito del Gobierno, y es lo que está pasando.


Objetivamente, la Villa ha recibido un gigantesco presupuesto...

-¿De cuánto? -

No manejo las cifras en este momento, pero creo que comparativamente la Villa recibe tres veces más que el CNAC (Centro Nacional Autónomo de Cinematografía) y ha sacado hasta ahora cuatro estrenos. Entonces uno se pregunta, ¿cuál es la eficacia de la Villa?

-Pero lleva dos años apenas ¿No es muy corto el tiempo para sacar conclusiones? -

Por supuesto, pero ¿a ti te parece un presupuesto tan grande para apenas cuatro películas? La segunda pregunta que yo me hago es ¿cómo y en qué momento la Villa derivó de ese proyecto que en papel era excelente, para ser lo que su propia presidenta declaró la semana pasada: que a la Villa lo que le interesa es un cine político? Yo me pregunto ¿es político o partidista? Porque la diferencia es bastante grande...

Para los gremios, el principal problema es mantener al CNAC con vida, fortalecido, funcionando y, por encima de todas las cosas, abierto y plural, que al CNAC vengan, como han venido, chavistas, no chavistas, ni-ni, y hagan sus películas y que sean escogidos los proyectos en comisiones plurales, donde están representados el Estado y los gremios.

No es que a nosotros no nos interese la Villa o que la estemos despreciando, simplemente que la Villa, como es actualmente, que con un dineral ha hecho apenas cuatro películas y cuyos voceros declaran que lo que les interesa es hacer películas al servicio de un bando, no nos interesa.

-Ellos dicen que todo cine es ideológico, desde Shrek hasta Superman. ¿Qué sería lo cuestionable de esto? -

Por supuesto que todo cine es ideológico y todo acto humano termina siendo un acto político, la trampa está en convertir la ideología y la posición política de una obra de arte en una posición partidista. Contraloría cero

-La Villa del Cine es una caja negra. A diferencia del CNAC, donde hay una contraloría social activa que la ejercen los gremios, yo no sé dónde está la contraloría de la Villa y creo que una contraloría social activa es lo mejor que puede tener un organismo del Estado bajo el Gobierno que sea.

-Al parecer, una muestra de la falta de transparencia es la coproducción con Danny Glover. -Ante este caso los gremios reaccionamos como teníamos que hacerlo, con dignidad, preguntándonos y preguntándole al Gobierno -que por cierto nunca contestó- bajo qué premisas a un señor que no es cineasta venezolano ni ha tenido coproducciones con Venezuela, que nunca se ha metido ni ha tenido relación alguna con Venezuela, de repente se le da un presupuesto gigantesco, lo que hasta ahora se la ha dado en cinco años al CNAC.

Eso se lo dio el presidente Hugo Chávez directamente, eso es un irrespeto y me lo preguntan quince veces y lo sostendré, y diré que el señor Danny Glover pertenece a la estirpe de los conquistadores, sólo que esta vez el señor no es blanco de ojos azules sino afrodescendiente, le pasó los espejitos y las bolas de cristal al Presidente por la cara y este le dio la plata.

-El ex ministro de la Cultura, Francisco Sesto, cuestionaba la legitimidad de los gremios. ¿Realmente son legítimos? ¿Se han revisado? -

Yo tengo tantos años en la dirigencia gremial y han sido tantos los ministros que han dicho que los gremios no son representativos, que somos cuatro gatos, que nos reunimos en un Volkswagen, pero los ministros han pasado y los gremios han quedado. ¿Qué dice eso? Caveprol tiene ya 30 años, ANAC (Asociación Nacional de Autores Cinematográficos) tiene más de 40, ¿eso qué indica? Al frente de todas las asociaciones gremiales del mundo se reúne una vanguardia... A la hora de las reuniones van 50, 40, 30, eso no le quita legitimidad a las asociaciones, eso significa que hay una vanguardia que está al frente de las luchas gremiales, pero cuando las cosas se han puesto apretadas para el cine venezolano, los cineastas se han unido. Ahora cuál es el gran peligro que yo le veo al cine venezolano en este momento, el mismo peligro que corre Venezuela: que hay un tsunami de dólares y este es un momento en el cual los cineastas tenemos que tener mucho cuidado con nuestra integridad, de cuáles son nuestras banderas, nuestras posiciones, porque los gobiernos pasan y el cine queda.

Entonces por una ventaja circunstancial, porque te den un crédito ahora o te llaman de la Villa y te dan para una película, no puedes olvidar las luchas de tantos años, lo que es justo y lo que no es.

-Hay gran apatía por parte de los jóvenes en afiliarse a estos gremios. ¿Cómo llamar su atención? -

Lo que se puede hacer es ser cada vez más eficientes, cada vez más activos, que los jóvenes vean que estás realmente resolviendo problemas y llevando a cabo luchas. Yo le hago una crítica a Caveprol: hemos llevado un trabajo muy arduo, hemos defendido los intereses básicos del cine, trabajamos en el reglamento de la ley, luchamos por los incentivos, hemos luchado por mantener el carácter democrático del CNAC, pero no hemos sabido dar a conocer nuestro trabajo, no hemos sabido dirigirnos al colectivo.

-¿Por qué se ha tardado tanto la aprobación del reglamento de la Ley de Cine? -Acuérdate que las leyes tienen su moméntum político. Nosotros por fin tenemos una Ley de Cine, y la logramos en la etapa de transición entre la Cuarta y la Quinta República, cuando los cineastas logramos permear la opinión positiva tanto de chavistas como de opositores para que se pusieran de acuerdo en la Asamblea que en aquel momento todavía era plural... Pero sí se ha tardado, y no por falta de lucha de los gremios o del CNAC.

-¿Cuáles serían los aplausos y críticas para Amazonia Films? -

Yo creo que montar una distribuidora del Estado es muy difícil, además ésta fue una petición de los cineastas de muchos años, y te digo lo mismo que con la Villa: si Amazonia de verdad se convierte en una distribuidora de buenas películas de otros países que normalmente no vemos aquí, no importa cuál sea su ideología, y excelentes desde el punto de vista de la calidad, aplausos para Amazonia.

Un buen consejo: no trates únicamente de comprar películas que te parezcan excelentes, cuyo planteamiento ideológico sea afín al tuyo, trata también de pensarlo como un negocio, tener en una mano el deseo de traer películas de calidad, pero por otro lado que sean películas que lleven el público a las salas.

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